La carnalidad de Monty
Siempre me gustó Monty. Siempre me fascinó esa mirada profunda y atormentada que despertaba mi instinto de protección al mismo tiempo que me arrastraba a imaginar qué oscuros secretos le torturaban. Pero he aquí que una foto, ésta, me ha llevado a un descubrimiento maravilloso: la espléndida carnalidad de sus muslos, a la vista de la cual son otros los instintos que se despiertan. Nunca hubiera imaginado así a Monty, tan apetecible bajo su aspecto algo etéreo, lejos de la sexualidad que proclama la anatomía estupenda de sus piernas. Podría cerrar perfectamente este artículo con un suspiro de deseo diametralmente opuesto a lo platónico de los sentimientos que siempre tuve por Monty, y sería comprensible, ¿verdad?
9 comentarios:
de el solo vi "Yo confieso" de ALfred HiTchkock,y la verdad el tipo era bien majete
necesito que Monty me haga trencitas en mi pelo.
Monty era un hombre muy especial. ¿Trencitas, Mari? Siempre consigues sorprenderme.
Besos a ambos
Esa mirada de atormentado, con la que provocaba darle un abrazo de oso... Hermoso hombre.
Hermoso y triste, Liliana, aunque a veces la tristeza también es hermosa.
Un hombre inteligente, con talento, que pudo tenerlo todo....
a mi lo que mas me cautiva es su mirada atormentada ..:)
A mí también... hasta que descubrí esos muslos, ;)
A mi madre siempre le encantó, pero a mí me parece que tiene cara de cura, y eso no lo soporto. Tengo un amigo que se parece a él, también en lo de bobillo...lo siento...se me escapó...gluip!
Besicos Raquel
¿No será por su papel en Yo confieso, Pilar?
Si lo ves en De aquí a la eternidad o en Un lugar en el sol, que hace el malo, se acabó esa imagen, ;) fíjate que se carga a su novia....malo, malo, remalo.
Besos
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